recent shows
Step Back
credits
layout: detonatedlove♥pictures: ohhspontaneityy stocks: _excentric_ |
diciembre 20, 2012 15:22
“El
que no tiene vida 2.0 no existe” es el nuevo “el que no tiene cédula no
existe”. Gabi una vez dijo que no tener vida virtual en estos tiempos era una
falta de consideración con los demás. Ambas afirmaciones tienen parte de verdad
y parte de exageración, aunque la de Gabi es mucho más divertida y genial y
estaba motivada por ese deseo de morbo que tenemos todos los seres humanos de
husmear en las vidas de los demás, ya sean estas exitosas o deprimentes,
glamurosas o simples.
A
las mujeres de mi edad (entraditas o a punto de entrar a los 30) o como yo, nos
enseñaron que la ropa sucia se lavaba en casa y que por lo tanto una dama no
hace escándalos, ni publica a los 4 vientos su vida privada porque es eso,
privada, dícese “lo que está dentro del periférico
personal”. Pero el
advenimiento de la vida 2.0 no sólo hizo que más de un “don nadie” existiera
para alguien en alguna parte del mundo, sino que además la esfera de lo privado
pasó de “a unos pocos” a “esto queda entre nosotros y Facebook.” Y usted puede
cambiar Facebook por la red social de su preferencia: Google, Twitter, Youtube,
Flickr, Last.fm, Tumblr, Blogger, Wordpress, Myspace, Linkedin, Skype,
Instagram y un sinfín de redes que se me escapan o desconozco, pero de todas
estas, Facebook no sólo es la “más completa” sino la más popular.
Yo
soy una usuaria muy, muy mala de Facebook, y siguiendo las palabras de Gabi
tengo cero consideración con el mundo. Casi nunca subo fotos de mi maravillosa
y espectacular vida, no actualizo el estado marital por lo que mis “seguidores”
no pueden saber si sigo con el mismo, con otro, si ya me casé o si estoy
desgraciadamente soltera. No le doy poke a
nadie, ni acepto las invitaciones que me envían de las cien mil aplicaciones
que tiene la red, así que no tengo granjita ni vampiros que alimentar. Tampoco
veo mis requests por lo que la gente
puede quedarse esperando siglos mi respuesta y casi nunca tengo el chat
habilitado. En fin, soy una pésima usuaria de Facebook, en estos tiempos de
vida 2.0 debería ser lapidada virtualmente por ello.
Sin
embargo, los fines de semana (que es cuando entro a chismosear y que son los
días de mayor actividad de la red, supongo yo) la náusea se apodera de mí.
¿Dónde carajos ha quedado el pudor de la gente? ¿El decoro? ¿La privacidad? ¿El
recato? Yo sí me creí el cuento completico.
Empezaré
por el Update Status. Frases como “mi
bebé hemosho ti quelo mucho” refiriéndose al sujeto con el que se dan piquitos
y algo más, me quitan las ganas de vivir. Me entran deseos enormes de
escribirle a la fulana en cuestión y decirle “con mucho cariño quiero decirte
que no escribas esas cosas tan bobas, tú eres una mujer que ya sobrepasa los
30, madura, no seas boleta ni infantil, supera esos clichés del lenguaje
romántico y más bien, si quieres, empapela la casa con esta frasecita cursi, y
así él no tendrá ninguna duda de que realmente lo quieres”. Lo que me sorprende
en realidad es que en pleno siglo XXI haya gente que todavía use el “bebé” como
expresión de afecto y haya gente que esté cómoda con que se lo digan. Supongo
que eso se debe al hecho de que aun en la adultez, los seres humanos seguimos
mamando aunque en otras formas.
En
general yo no tengo problema con las demostraciones de amor y afecto en público
si están dentro de lo normal, el maniculitanteo
sí por favor dejarlo para los confines del nido de amor. Es decir, ver una
pareja que anda cogida de la mano, que se da besos en una reunión, que se dicen
cosas bonitas en frente de familiares y amigos, que se echa a tomar el sol en
el Parque Nacional, que abrazan y acarician (sin maniculitanteo) está bien para mí, porque generalmente son actos y
expresiones que surgen de la espontaneidad sin querer llamar la atención de
nadie…y eso es precisamente lo que no sucede con estas frases puestas en
Facebook. Eso me lleva a una segunda preocupación: ¿Por qué en lugar de decirlo
en público no se lo dicen al directamente implicado? ¿Miedo, vergüenza, ganas
de llamar la atención, mostrar a todos lo feliz que se está, incontinencia
verbal? ¿Qué pasa cuando el depositario del afecto no tiene Facebook? ¿A dónde
van todos esos signos de puntuación y admiración puestos con tanto amor? Estoy
segura que al mar no.
Lo
segundo, pero más repulsivo que las frases son las fotos. Ahí sí el filtro de
qué poner y qué no se perdió. Aclaro, cada quien puede tomarse las fotos que le
venga en gana y así mismo publicarlas, pero créame que de eso depende mucho lo
que otras personas vayan a pensar de usted de ahí en adelante. Fotos que
realmente pertenecen a la privacidad bien sea de la persona o de la pareja no
deberían ser publicadas. ¿Para qué publicar las fotos de la ducha, o el
jacuzzi, o la cama del hotel (de la luna de miel) o del nuevo baby doll? Más bien cuéntenos que la
está pasando pipa y que todo es muy bello o muy exquisito o lo que quiera; eso
ya nos da una idea.
Y
sin embargo, la sobre exposición de esa vida tan feliz, maravillosa y perfecta
que todos tienen en fb además de ser un poco empalagosa y llenadora es
sospecha. Nadie es tan perfectamente perfecto, todo lo contrario, lo único
perfecto son las imperfecciones con las que vivimos, las que venimos y las que tenemos. Me gusta ver las fotos de
mis amigos y parientes y les doy “like” cuando así lo deseo, pero no dejo de
preguntarme ¿qué es lo quieres demostrar al mostrar 1278 fotos de sitios
maravillosos, fiestas grandiosas y planes exóticos, de una vida envidiable
jamás soñada? Facebook y cualquiera de las otras redes lo aguantan todo: desde
la carga de millones de fotos hasta la falsedad ya sea de un estilo de vida, de
una filosofía o de una opinión.
Si
lo que quiere es pelar teta o mostrar la chocolatina, me parece que Soho o
Playboy son espacios más adecuados. No tengo nada en contra de los desnudos,
pero como en casi todo, el asunto del buen gusto es fundamental (y ojo que en
Soho y Playboy he visto viejas muy regulitas pese a lo “artístico” de la foto).
La foto en picada, o con la lengua afuera, o la boca de pato y las posiciones
“provocadoras” bien logradas son buenas fotos, de lo contrario lo mejor es que
las deje para que usted o su pareja las disfruten.
El
otro asunto que me perturba y mucho, es el de la ecografía fetal en 3D. Yo
entiendo que la maternidad es algo muy especial, lo sé porque lo he visto en
mis amigos que son padres y la felicidad rebosante en sus ojos cuando están
esperando a su hijito, y yo me alegro con y por ellos y soy la más roscona a la
hora de desearles cosas bonitas a ellos y a su pequeño vástago. Pero una cosa
es eso y otra la ecografía. No entiendo cómo la gente dice “divino!!!” o “qué
belleza!!!” frente a un ultrasonido. Yo no sólo no creo que sea divino, sino
que es aterrador en 3D. No conozco el primer feto bonito, incluso no somos
bonitos al nacer. La participación del embarazo y el nacimiento, es otro de
esos asuntos en la vida que me parece debe aplicar para la acepción de privado
a la antigua, sólo para el periférico personal.
Aun
no tengo claro si con el advenimiento del mundo 2.0 y las mal llamadas redes
sociales la privacidad desapareció o se transformó, lo que sí es claro, es que
tanto nativos como inmigrantes digitales han asumido este cambio y logrado
adaptarse bien a él, aunque probablemente no de la manera más adecuada, o por
lo menos no adecuada para mí, o tal vez es que yo no he podido acostumbrarme
dar el salto digital y me quedé en el siglo XX. Lo que sí sé es que yo valoro
mucho mi privacidad, muestro lo que quiero cuando quiero y así como uso mis
redes sociales para sobreactuarme también las uso para pedir favores, solicitar
información y compartir información de toda clase y esa maraña de cosas les ha
permitido a las personas tener una idea de quién soy yo y cómo deben tratarme,
bueno, malo o regular. Y a la larga eso es lo que estamos haciendo todos, exponer
nuestra vida privada y personal a cientos de personas en el mundo, lo único que
hace es permitirles que entren en ella, pasen, se sientan y opinen…les hemos
dejado abierta la puerta.
Etiquetas: Desvaríos mentales, Explosiones, Personales, Reflexiones, Sociedad, Urgencias diciembre 05, 2012 11:33
Ad portas de entrar a los 30 y su inevitable crisis, después de la terminada de Luis Felipe, pienso que las relaciones no sólo son difíciles, sino que su dificultad se va incrementando con los años. Si mis exnovios me hubiesen visto ahora en mi última relación, me habrían hecho reclamos de por qué no pude ser así con ellos y en cambio, por qué sí fui más bien insoportable y malcriada. La respuesta es "maduré". Uno aprende a golpes y totazos, al menos yo que tengo una mal educación emocional llena de taras y muletillas y la verdad, me enorgullezco de mí misma y de lo que he podido lograr...pero eso no fue suficiente con Luis Felipe, mis automáticos me traicionan y aunque lo quise, acompañé, mimé e hice todo aquello de lo que estaba segura debe hacerse para llevar con éxito una relación y controlé todos mis impulsos negativos, ayer, me dijo, que definitivamente no éramos compatibles. Luego pensé "vaya, no sólo basta con querer darlo todo en una relación y darlo realmente, también se necesita que el otro esté en la misma longitud de onda para que pueda apreciarlo, en lugar de salir corriendo a las primeras de cambio". Lo pensé por que luego de que me dijo mil veces que yo era lo más bonito que tenía en su vida, un día simplemente decidió dejarlo ir por una única cosa mala y yo no entendí. Supongo que nunca estuvo ahí, no comprometido realmente, de lo contrario hubiese hecho eso a un lado para disfrutar de todo lo demás que realmente creo que valía la pena...pero eso es lo que pienso yo y claramente él y yo estábamos en dos longitudes de onda totalmente diferentes. Etiquetas: Adiós, Cierres, Desamor, Desvaríos mentales, Frustración, Personales, Reflexiones |
wilkommen
Bienvenidos sean todos a mi casa, la que también es de ustedes. Pasen, sigan, siéntense o acomódense donde quieran, donde más les plazca. Eso sí, recuerden que ésta es la casa de una Bailarina, por lo que el espacio más grande, hermoso y agradable es el salón de baile. Ahí, es donde paso la mayor parte del tiempo, sola o acompañada, donde soy feliz. LET'S COME IN, LET'S GO DANCE all about moi
A little bit of narcissism won't hurt, and vanity isn't a sin.
Una negra disfrazada de blanca, gitana por azar, nueva economista, nostálgica, melancólica, irremediablemente terca, complicada y compleja, ambivalente, acuariana según el horóscopo, amante compulsiva del blues el jazz y el bossa, bailarina innata y bailarina de salsa casino, en exceso sensible, derretida por un chocolate y un vino tinto, cantante e imitadora por hobby y alguien que empezó hace algún tiempo a descubrir quién era en realidad.... My favorite things
Bailar, bailar salsa casino, leer, escuchar música, cantar, hacer teatro, ir a eventos culturales, hablar basura con las personas que quiero, tener momentos a solas que me permitan interiorizar, disfrutar al lado de mi familia y estar en la red, el cine, mis amigos, los hombres, el sexo, la sexualidad, el arte...el cuerpo
The Breath of Other
DEJA TU HUELLA AQUÍ The ones who are in the soul
32 grados
Writing About VisualBitácora Utópica Cuesta mucho verla sonreir... photo.music.door is a girl La Rana Berden (Blogocosa) Más allá del ecologismo...(2.0) Mi felicidad y yo The ones who are in the lounge room
Este Lote No Está en Venta FAMINEsstetica (Blogocosa) Imagen En Movimiento Leyendo la mente Loquera JAVIER AKERMAN MOMENTOS DE VIDA NO ES CUESTIÓN DE HORMONAS sex sthinks....sometimes The ones who incite the senses from far away
caminando sobre brasas ardientes
El mar más grande que hay En medio del ruido Fujazz 3.0 JULIANA FORERO - BOARDING PASS LA NAVE DE ARGOS La Verdadera Vida De Un Gerente MOST PEOPLE DIE AT HOME Museo de la confusion Patton en el país del sagrado corazón... Schatzy!!! Spirit of dreams ::: SOLEDAD Y OSCURIDAD ::: Viva la resistance Blogocosa caleña
equinoXio
Other articulations
|